- Área: 200 m²
- Año: 2019
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Fotografías:Gonzalo Viramonte
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Proveedores: Calcarte Salta, Castellani Vidrios, JOHNSON, Robinet, Sanitarios Ferrum
“Las Caballerizas” es una casa de fin de semana construida a partir del reciclaje de unas caballerizas antiguas. En esta obra los planos iniciales solo fueron un punto de partida para empezar a soñar. El proceso de diseño, constructivo, de re construcción y re funcionalización fue trabajo artesanal, donde todos los que participaron, ayudaron a construir el espíritu de esta obra, a definir los detalles y rincones. “Construir un rancho” donde poder pasar un fin de semana con todos sus hijos y nietos fue el pedido del cliente. Recuperar este lugar donde había pasado su infancia.
La premisa fue restaurar la construcción original de piedra y mantenerla, a pesar del mal estado en el que se encontraba. Reciclar y refuncionalizar manteniendo se esencia y espíritu. Implantadas en un lugar donde el paisaje es protagonista, el mismo fue otro condicionante a tener en cuenta. ¿Como integrar el paisaje y la naturaleza a la vida del rancho?, ¿como hacerlos participes de la vida social que iba a tener, sin perder la sensación de resguardo que transmitían sus anchos muros de piedra?.
Con los caballos como testigos del proceso, el proyecto fue tomando forma. Se decidió utilizar cada uno de los boxes como dormitorios, baños y un pequeño sector de estar. Respetando los materiales originales en la planta baja y su disposición, conservando incluso los bebederos de los caballos. Se mantuvo el esquema de patio central original. El sector social se ubicó en un pabellón metálico en planta alta aprovechando los desniveles del terreno. Constituido por un gran espacio de cocina, estar, comedor y galería que se abre hacia el exterior a través de grandes ventanales y se vincula con el terreno por medio de un puente de chapa pñegada, que se integra con una terraza de piedra con un asador y horno de barro bajo la sombra de los árboles.
Este nuevo volumen construido con estructura metálica y vidrio se apoya sobre la construcción original marcando dos funciones distintas y dos épocas de construcción muy diferentes. Pasado y presente conviven en armonía, junto con el paisaje y la familia de tres generaciones que llenan de risas y encuentros todos los espacios.
En cuanto a los materiales utilizados, para el volumen metálico en planta alta, se pensó en materiales de fácil mantenimiento, como así también en la posibilidad de poder cerrar toda la casa durante los días que no se usa. Con respecto a la planta baja existente y el conjunto, se buscó mantener el espíritu de la construcción original y del lugar a través de materiales, detalles y equipamiento que lo transmitan y sean coherentes con él.